La cerradura invisible es, sin duda, uno de los tipos de cerradura más popular de los últimos tiempos. Esto se debe a varios factores. En primer lugar, su posición: la cerradura invisible no se encuentra en el exterior de la puerta como cualquier otro tipo de cerradura. Se encuentra sólo en el interior de la puerta y este es de hecho uno de los puntos fuertes a su favor para evitar los robos derivados de la manipulación de una cerradura.
Sin embargo, como veremos más adelante, esto no quiere decir que por no verse no pueda manipularse. Existen riesgos, como es natural: el mundo de la cerrajería es siempre una lucha donde, afortunadamente, los profesionales vamos por delante. Sólo falta que el consumidor en último término se deje guiar por nuestros consejos, y es de hecho con el propósito de aconsejaros que hacemos este artículo y otros de temática similar. La información es siempre lo más valioso: deja que te hablemos un poco más de este tipo de cerradura, la cerradura invisible.
Cerrajeros 24 horas te informa: cerraduras invisibles
Como hemos dicho, su nombre deriva de ser una cerradura cuyo dispositivo se encuentra en la parte trasera de la puerta (el interior) en lugar de en el frontal. Consiste en un mecanismo que va insertado a la puerta y que se acciona mediante un mando a distancia. Es por ello que podemos abrirla al accionar dicho mando cuando nos encontramos cerca. Funcionan con un sistema de pistones y contrapistones.
Estos se juntan y separan según las órdenes recibidas del dispositivo matriz (el mando). Es por lo tanto un tipo de cerradura muy cómoda. Nos permite “echar la llave” pulsando sólo una tecla, tanto si estamos dentro de casa como si queremos salir fuera. El sistema se acciona de manera rápida y cuenta de hecho con alertas para verificar que su funcionamiento es correcto.
Sin embargo, tiene varios inconvenientes. En primer lugar, es un sistema “postizo”, es decir, no está integrado internamente a la puerta. El sistema de cerradura invisible está más bien adherido a ella, normalmente con un pegamento extrafuerte o taladros. Lo idóneo es que en un sistema de cerradura (sea cual sea el tipo) todo el sistema esté incrustado en la puerta.
De esta manera hacemos que toda la puerta sea la que sostiene la seguridad junto con la cerradura que tenga integrada y no sólo dependa de la sujeción de la cerradura. En efecto, uno de los principales inconvenientes es precisamente que el sistema de cerraduras invisible queda fuera de la puerta, no está integrada a ella: si se desprende (cosa que puede ocurrir intencionadamente o no) nuestra puerta quedará vulnerable.
¿Cuándo instalar cerraduras invisibles?
Otro de los inconvenientes es que, si bien las cerraduras invisibles son prácticas y están bien equipadas para un uso en nuestro domicilio habitual, no son muy indicadas para segundas viviendas. Esto se debe a la propia naturaleza del dispositivo, que, aunque lo hace más cómodo en su uso, hace que igualmente posea algunos hándicaps difíciles de superar. Nos referimos concretamente a la capacidad de autonomía de su batería interna.
Las cerraduras invisibles cuentan con el dispositivo de la cerradura y el mando. El primero (como todo sistema de alarma) tiene integrada una batería que le permite de hecho funcionar correctamente. Esta debe ser autónoma precisamente para evitar que deje de funcionar cuando hay algún corte de luz. Sin embargo, eso hace que se gaste. Como hemos dicho, las cerraduras invisibles presentan este problema que, para el caso de viviendas habituales no presenta muchos inconvenientes: bastará con cambiar la batería cuando su piloto se encienda.
Ahora bien, para el caso de segundas viviendas, puede suceder que por no haberlas visitado durante una larga temporada nuestro sistema de cerradura invisible haya quedado descargado y no responda cuando volvamos. Eso hará que tengamos que llamar a un cerrajero que, como consecuencia de que se tratan de cerraduras internas, deba perforar la puerta para tener acceso al dispositivo.
Cerrajeros de urgencia: instalación de cerraduras
Así pues, las cerraduras invisibles son un tipo de cerraduras que por sus ventajas son especialmente indicadas para espacios concretos aunque por sus inconvenientes deben ser descartadas para otros como, por ejemplo, la puerta principal o de acceso a la casa. Es un buen sistema para un domicilio habitual y para habitaciones que estén dentro de él por los puntos que hemos comentado.
A pesar de todo, y por ser de hecho un tipo de cerradura nuevo en el mercado, necesita mejoras que sólo el tiempo puede traer. Nadie duda de que al perfeccionarlo puede convertirse de hecho en un sistema muy popular y de amplia difusión. Ahora bien, dicho avance es fundamental de momento.
Para este y otros casos te recomendamos como siempre que consultes con cerrajeros expertos. Nuestra experiencia nos dice que antes de instalar es mejor consultar. Por ello te animamos a consultar otros artículos disponibles en nuestra web para manejar toda la información posible antes de instalar cualquier tipo de cerradura.